Protección del endpoint para evitar, detectar y responder ante amenazas avanzadas.

El endpoint es uno de los blancos favoritos de los delincuentes digitales, especialmente cuando están fuera de la red empresarial. Los ataques cibernéticos de avanzada están diseñados para aprovechar las vulnerabilidades de los endpoints. Suelen evadir las protecciones que proporcionan los sistemas tradicionales y cada vez se hacen más frecuentes. 

Conozca como la solución de WatchGuard Panda Adaptive Defense 360 puede proteger, defender y reaccionar efectivamente contra amenazas conocidas y desconocidas.

Lo que hace que un endpoint sea vulnerable

Estos son los principales blancos de los criminales informáticos y sobre los cuales se deben tomar acciones contundentes de detección, prevención y respuesta.

Debilidades en los Sistemas Operativos

A nivel de 2019, Microsoft fue el fabricante o desarrollador con más vulnerabilidades conocidas. Esto sin contabilizar las vulnerabilidades aún desconocidas, que dan lugar a los llamados ataques de día cero, en los que las protecciones convencionales no pueden hacer nada al respecto.

¿Cómo evitarlo?

Ejecución de aplicaciones maliciosas

Las técnicas de engaño a los usuarios finales se hace cada vez más sofisticadas y difíciles de detectar mediante el sentido común. Esto hace que muchos usuarios caigan en trampas de ingeniería social y terminen permitiendo la instalación de software en sus sistemas operativos o de exploits en los navegadores que pueden hacer que un atacante malicioso pueda controlar el endpoint y tener acceso a la red empresarial, aún cuando el usuario esté fuera del perímetro de la red corporativa.

En la mayoría de las ocasiones estos ataques terminan con la implementación del conocido ransomware que ha hecho perder miles de millones de dólares en toda la industria a nivel mundial.

Software desactualizado

El uso de software y aplicaciones desactualizado en el sistema operativo genera potenciales brechas de seguridad que son eventualmente corregidas por la mayoría de los fabricantes, pero no siempre estos parches son aplicados por el dispositivo endpoint del usuario.

Hasta un usuario bien intencionado puede accidentalmente instalar software potencialmente peligroso pero no lo suficiente como para alertar a los sistemas tradicionales de protección como un antivirus clásico.

Solo un sistema de protección del endpoint sofisticado puede detectar este tipo de brechas y tomar acciones preventivas antes de que ocurra cualquier intento de ataque.

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